Pianos nuevos, pianos antiguos, pianos de lujo o pianos poco convencionales. Estos instrumentos han acompañado innumerables películas con su banda sonora y, en no pocos casos, son los protagonistas de las historias que se cuentan.
Algunas de las películas donde el centro de atención es el piano son las siguentes que os detallamos:
Para comenzar, ya durante la época del cine mudo la música de piano se utilizaba para amenizar las películas sin sonido. Posteriormente, desde que comenzó el cine sonoro, el piano ha sido y es coprotagonista en muchos casos, historias del celuloide que no se entenderían sin su presencia.
Muchas de esas cintas son las que las que repasan la vida, más o menos novelada, de músicos y compositores, reales o ficticios. Algunas de ellas son “Mi nombre es Bach” (2003), “Die stille vor Bach” (“El silencio antes de Bach”, 2007), “Amadeus” (1984), que narra la vida de Mozart, “Copying Beethoven” (2006), “Albéniz” (1947), basada en la vida del compositor español, “Ray” (2004), que nos relata la vida de Ray Charles, “Great balls of fire” (1989), basada en Jerry Lee Lewis, y así hasta un extenso listado.
A estas películas se suman otras como “Casablanca” (1942), todo un clásico del cine. La historia gira en gran medida en torno al piano del Rick’s Café y a su pianista Sam, que interpreta una y otra vez el tema “As Time Goes By”. El piano, con su extravagante decoración arabesca centró años más tarde las miradas de los coleccionistas y fue subastado por una cifra millonaria.
Memorable es la historia que se narra en “El Pianista” (2002), basada en hechos reales. En ella, el músico polaco de origen judío W. Szpilman consigue salvar su vida durante la invasión nazi gracias a su maestría al piano, en el que suenan piezas de Bach y Chopin.
La coproducción española “Grand Piano” (2013) es un thriller en el que su protagonista, un pianista con miedo escénico, debe realizar un concierto perfecto para no morir. Toda la película transcurre en torno al piano y músico.
En “El Piano” (1993) se cuenta la historia de una pianista muda que viaja a Nueva Zelanda con su hija y su piano con motivo para casarse. El piano queda abandonado en la playa ante la negativa del marido de cargar con él.
Del otro lado del mundo nos llegan dos obras japonesas muy poco conocidas aquí:
En “El bosque del piano” (“Piano mori”, 2007), una cinta anime de cine mágico, se narra la historia de un chico que quiere ser pianista. Sus compañeros le gastan una broma haciéndole tocar un piano escondido en un bosque y que no suena.
Dirigida por K. Kurosawa y premiada en Cannes, “Tokyo Sonata” (2008) nos habla de la desintegración de la familia japonesa media actual a través de la historia del hijo menor, que desea ser pianista y estudia piano a escondidas.